miércoles, 18 de junio de 2014
viernes, 14 de septiembre de 2012
http://denkomesa.blogspot.com.es
La escuela demanda un nuevo escenario emocional
Cuanto más compleja se hace la sociedad, más necesita, para mantenerse
equilibrada, instruirse para reconocer y tratar bien las emociones. Saber
comunicar la semántica y la sintaxis de las emociones es una capacidad y una
sensibilidad ineludible para aquel que desee ser un co-protagonista, atento,
crítico y responsable en el escenario del mundo del siglo XXI.
_____________
Las emociones, decía Gregory
Bateson, son informaciones parciales de campos transaccionales. Para
entenderlas, debemos ver la danza completa, el cuadro dialógico completo.
Debemos ver las reacciones a las reacciones de las reacciones, esto es, la
circularidad. Las emociones son siempre el resultado de concertaciones a muchas
voces.
La envidia maligna es un paso de la danza más global envidia-altanería; no podemos sentir envidia maligna sin atribuir arrogancia, presunción, altanería, al compañero del intercambio transaccional. Pensad en cuanto habéis sentido un arranque de envidia rencorosa por el éxito de una colega y os habéis percatado de que esta reaccionaba con modestia a su éxito. Os habéis quedado mal. Quizás habéis sentido hacia ella una hostilidad todavía mayor, o quizás os habéis apresurado a cambiar la danza. Dabais por descontado que en ese caso había que bailar el tango y en cambio ella bailaba el vals. Es así como, emocionalmente hablando, ¡nos pisa los pies! Está claro que no hay nada determinado, que siempre puedo elegir.
La envidia maligna es un paso de la danza más global envidia-altanería; no podemos sentir envidia maligna sin atribuir arrogancia, presunción, altanería, al compañero del intercambio transaccional. Pensad en cuanto habéis sentido un arranque de envidia rencorosa por el éxito de una colega y os habéis percatado de que esta reaccionaba con modestia a su éxito. Os habéis quedado mal. Quizás habéis sentido hacia ella una hostilidad todavía mayor, o quizás os habéis apresurado a cambiar la danza. Dabais por descontado que en ese caso había que bailar el tango y en cambio ella bailaba el vals. Es así como, emocionalmente hablando, ¡nos pisa los pies! Está claro que no hay nada determinado, que siempre puedo elegir.
Pero para hacerlo, debo haber
explorado el arco de las posibilidades, debo saber que existen otras danzas. Gran
parte de la tristeza, del clima recargado que se sufre en la escuela, se debe
al hecho de que en ella se consienten y cultivan arcos emocionales demasiados
estrechos, sofocantes. Para cultivar arcos emocionales más amplios, se necesita
el toque del sentido del humor. Pero este es el tercer y último punto, que
concierne a una epistemología sistémica, capaz de considerar a la realidad una
construcción social a más niveles lógicos, ninguno de los cuales concluye en sí
mismo.
Es la epistemología indispensable para afrontar el tema del saber de las emociones. Si uno me da un puñetazo, me está mandando un mensaje del tipo: “jugamos a luchar” (también puede ser un juego doloroso o mortal…). Y entonces debo saber que cuando yo también respondo con un puñetazo, en un nivel me estoy oponiendo, en otro estoy colaborando. Me he dejado implicar en la danza que el otro proponía con el puñetazo.
Por otra parte, si no reacciono y me hago la víctima, no me sustraigo a ese juego, simplemente estoy colaborando para concluirlo muy deprisa, en favor de otro juego: el de la víctima y el verdugo. Hemos jugado y él ha vencido. El único modo verdadero de no colaborar es inducir al otro a cambiar de danza. Nunca es fácil, pero es relativamente más fácil si soy consciente de que el otro no puede proseguir en su juego, en su danza, sin mi colaboración. Esta consciencia (que implica la actitud que llamo “con sentido del humor”) está en la base de todos los tratados sobre la gestión creativa de los conflictos. Y también en el origen de las técnicas de Gandhi la no violencia, que sería muy útil poder estudiar en la escuela.
Es la epistemología indispensable para afrontar el tema del saber de las emociones. Si uno me da un puñetazo, me está mandando un mensaje del tipo: “jugamos a luchar” (también puede ser un juego doloroso o mortal…). Y entonces debo saber que cuando yo también respondo con un puñetazo, en un nivel me estoy oponiendo, en otro estoy colaborando. Me he dejado implicar en la danza que el otro proponía con el puñetazo.
Por otra parte, si no reacciono y me hago la víctima, no me sustraigo a ese juego, simplemente estoy colaborando para concluirlo muy deprisa, en favor de otro juego: el de la víctima y el verdugo. Hemos jugado y él ha vencido. El único modo verdadero de no colaborar es inducir al otro a cambiar de danza. Nunca es fácil, pero es relativamente más fácil si soy consciente de que el otro no puede proseguir en su juego, en su danza, sin mi colaboración. Esta consciencia (que implica la actitud que llamo “con sentido del humor”) está en la base de todos los tratados sobre la gestión creativa de los conflictos. Y también en el origen de las técnicas de Gandhi la no violencia, que sería muy útil poder estudiar en la escuela.
El establecimiento de cada
estructura social implica el establecimiento de danzas en las que todos lo
miembros, de una forma u otra, colaboran. Algunos dando puñetazos, otros
haciéndose las víctimas. En el rechazo del protagonismo de iguales, en nuestra
escuela, podemos colaborar tanto saboteándolo como dejando que cada uno haga lo
que quiera. O bien podemos cambiar nuestra danza e inducir a los otros a que
cambien su danza.
Puedo reaccionar al éxito de una
colega con envidia maligna… ¿o bien? Al contrario que la envidia maligna,
dentro del sistema vigente, no hay envidia benigna, sino cortesía. Reaccionando
con hastío o con adulación, contribuyo a reproducir el juego “tu elevado –yo
rebajado”. En cambio, con la envidia benigna nos proponemos a nosotros mismos y
al interlocutor cambiar el juego. Esta es la gestión creativa de los
conflictos. El cambio de las estructuras y de esa parte de nuestra personalidad
es lo que invertimos en la vida en la escuela.
En un periodo de cambio las
emociones anteriormente descritas están firmemente en el centro de atención,
precisamente porque, de forma característica, en el intercambio hay gente que
toma iniciativa, que es elogiada, que revisa el valor de lo que estamos
haciendo. Para gestionar con gentileza este proceso es necesario tomarlo y
tomarnos con sentido del humor.
Termino poniéndoos una fórmula:
saber de las emociones + toque de humor = arte de escuchar. El arte de escuchar
es el recurso y la característica principal de una autorreforma gentil.http://denkomesa.blogspot.com.es
martes, 10 de julio de 2012
De Donde Vienes...
¿ De donde venia tu mente ?
¿ Quien eras entonces ?
¿ Donde esta tu mente hoy ?
¿ Quien sos hoy ?
Tu Mente no te dice quien eres, sino de donde vienes.
¿ Quien eras entonces ?
¿ Donde esta tu mente hoy ?
¿ Quien sos hoy ?
Tu Mente no te dice quien eres, sino de donde vienes.
lunes, 7 de mayo de 2012
Paramitas: La paciencia
Los seis Paramitas son una enseñanza
del Budismo Mahayana. Paramita puede ser traducido como “perfección” o
“realización perfecta”. Esta perfección no es una realización normal u
ordinaria sino la trascendencia de la realización. A menudo vemos
que paramita es traducido como “cruzar hacia la otra orilla”,
refiriéndose a la orilla del no-miedo y libertad. Para cruzar desde
donde estamos debemos hacer algo y esto es paramita.
Sentado en postura de meditación:
Importante:
Omshantih
Carola Terreni.
http://www.kaladanda.com.ar
La tercer paramita es la paciencia.
Cuando decimos la perfección de la paciencia nos referimos a no
enojarnos nunca más. Suena difícil porque pensamos que no enojarnos
es reprimir el enojo, pero acá estamos hablando de algo diferente.
Los Lamas nos dicen que el primer paso
es estar lo mas “despierta” o presente posible siempre. De este modo
cuando surja la ira puedo observarla estando ahí. En el presente es lo
que hay, estoy enojada. En vez de reaccionar (en vez de devolver la
bofetada) observo lo que me pasa. Si puedo estar así unos segundos
tengo una gran chance de no explotar.
El tema es ¿qué hago entonces? Me quedo mirando la ira y ¿qué más?
Este es el momento clave para hacer una
práctica que puede cambiarlo todo a tal punto de que en el futuro no
me enoje más, porque en vez de surgir la ira va a surgir la sabiduría,
y entonces no tendré ningún enojo que reprimir.
La practica se llama Mahamudra
es una forma de aplicar los seis sabores de la vacuidad a nuestra
mente, en este caso una emoción, el enojo. La mente tiene muchas
“partes” como discriminación, conciencia y demás pero esta meditación
es indicada especialmente para focalizar en las emociones ya que son de
fácil acceso y son las que tienden a causarnos muchos problemas
cuando las vemos como auto existentes. Nos llevan a hacer cosas
negativas para evitar lo que no nos gusta y adquirir lo que si nos
gusta.
Les doy un ejemplo de la meditación Mahamudra tal como fue guiada por mi Lama Geshe Michael Roach.
Esta meditación nos lleva a través de
las seis visiones incorrectas del mundo. Vamos estableciendo una por
una que no pueden ser verdad, que de hecho lo que estas visiones
profesan es imposible. Así llegamos a los seis sabores de la vacuidad.
Sostenemos cada una de estas visiones constantemente en nuestra vida
diaria y cada paso para eliminarlas nos acerca al puro entendimiento
de la vacuidad misma. En sentido último solo la 6 es correcta.
- Visión incorrecta: Creo que esta emoción (enojo) va a durar por un rato.
Visión correcta: Mis emociones cambian constantemente segundo a segundo. Si miro con atención veo que el enojo varía, es como el sonido de un avión que sobrevuela mi casa- pasa rápidamente, y en su corta duración esta constantemente cambiando, a veces mas fuerte, otras más suave. - Visión incorrecta: Puedo controlar como me siento
Visión correcta: No tengo control de mis emociones en el momento presente. Los pensamientos y las emociones vienen a mi mente sin ser llamados. Yo nunca invite a este enojo a que venga a perturbar mi paz mental. - Visión incorrecta: Estoy a la merced de mis emociones azarosas.
Visión correcta: Una de mis acciones del pasado es la causa de esta emoción y de mi misma percibiéndola. Parece que estoy siendo bombardeada por esta emoción azarosa de enojo. Pero nada es azaroso. Me he traído a este momento y el enojo ha sido traído a este momento por el mismo karma- el hecho de que en el pasado cause enojo a otra persona. Soy completamente responsable. - Visión incorrecta: Esta emoción es definitivamente buena o mala.
Visión correcta: Estoy imponiendo un juicio a esta emoción. Este juicio no le es inherente y podría ser diferente. Creo que este enojo es algo negativo. Pero ¿acaso tiene maldad inherente? Podría mirar este enojo como una gran motivación para practicar más y así poder salir de este ciclo de sufrimiento para después liberar a los demás también. En este caso tendría que decir que el enojo es algo positivo. - Visión incorrecta: Fuerzas externas son completamente responsables por como me siento.
Visión correcta: Fuerzas externas combinadas con mis percepciones componen como me siento. Estoy convencida de que este enojo es causado por circunstancias externas: el mal tiempo, la falta de sueño, el dolor de cabeza, la persona que me irrita, etc. Creo que si esas cosas fueran diferentes yo seria feliz. Pero vamos, entonces podríamos trabajar para manipular las circunstancias externas y así estaríamos siempre felices. Eso no funciona. Incluso cuando todo lo externo es perfecto igual puede haber enojo que perdura. Así es que las circunstancias externas solo tienen un porcentaje de responsabilidad en como me siento y mi mente provee el resto. - Visión incorrecta: Hay algún factor externo que es responsable por como me siento.
Visión correcta: Como me siento es completamente una proyección. Las circunstancias externas tienen algo de responsabilidad en como me siento ¿verdad? Parece que si recibo un lindo regalo o las personas son amables conmigo yo voy a ser más feliz. Pero hay veces en que estoy tan enojada que ningún regalo y ninguna persona puede hacerme sentir bien. Y otras veces que estoy tan feliz que nada puede enojarme.
Estas emociones no tienen nada que ver con las circunstancias externas que creía que las causaban. Todo es una proyección que es forzada en mí por mis acciones pasadas. Estoy quiere decir que si planto las semillas correctas ahora, puedo crear un futuro de gracia divina cada momento del día.
1. No esperar a que aparezca la ira
para hacer esta meditación por primera vez. La práctica diaria de
sentarse y hacer Mahamudra a las emociones y pensamientos es lo que va
a hacer que cuando “las papas queman” (cuando aparece la persona
irritante) podamos aplicar esta sabiduría y así no devolver la
bofetada. No porque somos “buenos” o por reprimir el enojo, sino
porque llegamos al entendimiento de que nunca existió una bofetada en
el presente que no venga de una bofetada que yo di en el pasado, y que
lo único que no tengo que hacer ahora es devolverla. En el jardín de
mi mente soy jardinera.
2. Paciencia con la practica de la paciencia, crear un hermoso jardín lleva tiempo.Omshantih
Carola Terreni.
http://www.kaladanda.com.ar
domingo, 22 de abril de 2012
Dave Kusek
Estas son 10 recomendaciones para generar estrategias que pueden conducir al éxito en la música,
y en la vida. Por supuesto, no son infalibles y tienen más que ver con
el sentido común que con alguna habilidad especial, pero vale la pena la
lectura.
1. Vivir de la música es un privilegio. Ganalo.
Hay muy pocas cosas más satisfactorias que poder pasar el tiempo haciendo música. Si podés hacer de este trabajo tu medio de vida, tal vez puedas ser realmente feliz. Sin
embargo, las posibilidades de lograr el éxito son muy bajas y las
únicas personas que van a llegar van a tener que trabajar duro y ganarse
el derecho a ser músicos. Respetá el privilegio de tener la libertad
como para poder optar por este medio de vida (si la tenés) y honrá la
oportunidad.
2. Nadie está a cargo de tu musa, sólo vos. Sé feliz y positivo.
Cada individuo puede ser su peor enemigo. Incontables veces he oído a
artistas decirme las razones por qué su carrera no está funcionando. La
mayoría del tiempo se ponen obstáculos en el camino y señalan con el
dedo a la gente y las cosas que los frenan. Dejá de lloriquear y
culpar a los demás y tomá la decisión consciente de que vas a tener
éxito y que las cosas van a trabajar en tu favor. Vos estás creando tu propia realidad cada día, así que hacé que sea buena y sé excelente.
3. Práctica, práctica, práctica – luego, lanzate. Preparate de más.
Nunca se puede estar lo suficientemente listo ante una oportunidad.
Tus actuaciones en vivo siempre pueden ser mejores, tus canciones pueden
ser más sorprendentes, y tu forma de tocar sólo puede mejorar. Como CEO
de tu propio negocio de la música, debés aprender a dirigir la empresa de forma más eficaz,
llegar a más fans y ser un más efectivo comunicador en los medios
sociales. No te retraigas por no estar listo. Sé un profesional.
4. Si sos malo, nunca conseguirás llegar. Buscá la forma de ser genial.
Afrontémoslo, es muy difícil ser increíble. Algunas personas tienen
talento natural y se puede ver a los 5 segundos de conocerlos. Están
verdaderamente bendecidos. El resto de nosotros tenemos que encontrar
nuestro nicho, nuestra pasión, nuestro llamado y luego ir a por ellos.
Preguntá a la gente a tu alrededor para tener retroalimentación.
Encontrá lo que está bien y concentrate en eso. Conseguí otras personas
para que te ayuden. Si no te destacas de la multitud, vas a luchar para siempre. Sé increíble.
5. Aprendé a respirar y mantené tu enfoque. Mantené la calma.
No hay nada más agradable que trabajar con alguien que sepa quién es y
cuál es su meta. Recordá el viejo adagio de pensar antes de hablar, y
respirá profundamente antes de agredir a alguien. La mayoría de nosotros
tenemos muchas cosas en nuestras vidas y todos pueden beneficiarse de permanecer enfocados en sus objetivos y mantener la calma en la mayoría de las situaciones. Aprendé yoga, hacé ejercicio, corré, meditá, quedate quieto, respirá, aprendé quién sos.
6. No te tomes demasiado en serio, nadie más lo hace. Divertite.
Estoy sorprendido de cómo muchas personas pasan mucho tiempo mirando
hacia atrás y tratando de entender lo que la gente piensa de ellos. Esto
es preocuparse por el pasado y no abrazar el futuro.
Los comentarios son importantes, pero no te precipites hacia ellos ni
los dejes arruinar tu día. No les vas a gustar a todos, pero le vas a
caer mejor a más gente si la estás pasando bien.
7. No importa cuán difícil se pongan las cosas, avanzá. No te rindas.
La única cosa que ayudará al despegue de tu carrera es el impulso
hacia adelante. Así es como vas a alcanzar tus metas. Muchas personas
están atrapadas en su propio lodo. Tomá medidas, hacé un movimiento y
luego mirá qué pasa. No pierdas tiempo procastinando ni preocupándote
por lo difícil que es todo, simplemente hacé algo positivo para avanzar
tu causa. Te vas a sentir mucho mejor actuando en lugar de esperar o preocuparte.
8. Encontrá una manera de generar ingresoso. Comenzá con algo pequeño y crecé. Evitá estar en deuda.
Esta es probablemente la estrategia más importante de todas y el
motivo por el que tantos artistas se han metido en problemas en el
pasado al aceptar los adelantos de las discográficas. Después de todo,
es un préstamo grande. Obtené algún tipo de flujo de efectivo de inmediato, no importa cuán pequeño.
Vendé merchandising, tocá en vivo, licenciá tus canciones, tocá en
sesiones, enseñá, escribí, comenzá tu negocio musical. El mayor error
que podés hacer es pedir prestado un montón de dinero y gastarlo en
cosas que no importan.
9. Sé único y fiel a tu visión. Decí algo.
Las personas que recordamos son las que son únicas, emocionantes,
extraordinarias, provocativas, fascinantes, originales, creativas,
interesantes. La música es una forma básica de comunicación. Los artistas realmente exitosos tienen algo que decir y trabajan en entregar su mensaje.
Tus posibilidades de éxito aumentan exponencialmente si tenés una
posición y un mensaje únicos y creás un grupo de fans que te escuchen de
verdad porque tenés algo importante que decir.
10. Trabajá y tocá con gente como vos todos los días. Colaborá a menudo.
La música es una experiencia tribal. No se puede hacer buena música sólo.
Rodeate de gente talentosa, escriban juntos, toquen juntos, probá cosas
nuevas. Prueben nuevas ideas y aprendan. Escúchense unos a otros y
dejen que la música sea la manera de conectarse. Encontrá un productor,
un socio en la composición de canciones, otros músicos y sumérjanse
juntos. El todo es mayor que la suma de sus partes.
sábado, 8 de octubre de 2011
"La actitud en la vida cotidiana
es mirar cada uno
como la fuente de todo el pasado, presente y futura felicidad,
la liberación y la iluminación.
Entonces también, custodiar y cuidar a los demás.
Que viene de ética y conducta….
A continuación, sobre esta base
para ser útil y a tener respeto por los demás… ".
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